Si la secretaria general de inmigración y emigración, Marina
del Corral, dijo en su día que los jóvenes que se ven
obligados a emigrar, o mejor, a exiliarse porque no tienen oportunidades en nuestro
país se van porque tienen espíritu aventurero... ¿Por qué no va a ser el hecho de habilitar
hasta tres camas por habitación en hospitales saturados, un proyecto para el
fomento de socialización entre pacientes? La saturación del sistema sanitario público es
más que evidente. No sé si habrán tenido ustedes la mala suerte de acudir a consulta, revisión,
operación en los últimos años. Yo si he tenido el infortunio de acudir a
revisión post operatoria y tener esperar
hasta tres horas y media en un pasillo saturado de personas con un cabreo
impresionante y justificado .Y mi caso y el de las personas que estaban aquellos
días sentados en los bancos, de pie o en el suelo de aquellos pasillos
descoloridos y con olor a desinfectante no es exclusivo, ni mucho menos. Las
continuas quejas por esperas eternas a las puertas de una consulta, las listas
de espera de meses (incluso para enfermedades graves) para entrar en quirófano y la falta de camas y habitaciones en algunos
hospitales (llegando a habilitar hasta tres camas por habitación en hospitales
como el Virgen de la Macarena de Sevilla o el Hospital Clínico de Valencia) son
algunos de los aspectos más lamentables de nuestro sistema sanitario
actualmente. Según quienes aprobaron las medidas de recorte en un sector como
este, dichos recortes no son causa directa de estos perjuicios del sistema,
porque las “reducciones presupuestarias” se efectuaron en aquellas partidas no
esenciales y, por ello, no afecta a la calidad asistencial. ¿A qué se debe
entonces esta saturación? ¿Nos ha dado por enfermar a todos a la vez? ¿Los
profesionales son menos eficientes que antes?
Junto con las revueltas en Venezuela y Ucrania y asuntos de
nacional entre los que se encuentra el proyecto soberanista de Mas y el
desarrollo de las informaciones sobre la actuación de la guardia civil en los
hechos acontecidos en Ceuta en los que murieron 15 inmigrantes cuando
intentaban llegar a España a nado la noticia del día nos llega desde Toledo.
Allí, según adelantaba esta mañana la
cadena SER, habrían muerto dos pacientes en los pasillos en una semana el
pasado mes de Diciembre, resultado de la masificación de los servicios de
urgencias. La consejería de sanidad de Castilla la Mancha niega que dichas
pacientes hayan estado desatendidas o que falleciesen en los pasillos por falta
de camas, señalando además su avanzada edad 100 y 91 años respectivamente. En
cualquier caso la falta de espacio en el
hospital de Toledo, quizá representativo de algunos más, no la niega nadie. Los
facultativos de dicho centro se dirigieron y trasladaron al colegio de médicos un escrito en el que sostenían y se quejaban
de que "se ha llegado a un punto insostenible, con incorrecciones e
importantísimas demoras en la valoración de pacientes graves y múltiples faltas
en la seguridad de los mismos”. El consejero de sanidad anunció la semana
pasada, ante la presión mediática que se habilitarían 43 nuevas camas en el
complejo hospitalario. No sabemos a ciencia cierta de si estas mujeres
fallecieron o no en los pasillos, pero sabemos que hay gente que pasa allí, en
una camilla días enteros y hay varios testimonios que aseguran haber visto
morir a gente en pasillos. Llevar la degradación de nuestra dignidad con la que
nos golpean a diario hasta la muerte. Es tan triste…Esto de que los recortes
afectan será cosa nuestra, pero, por poner un ejemplo, según la cadena SER, en
este hospital del que hablamos, desde que llegó Cospedal a la presidencia de Castilla la Mancha el hospital
tiene 165 camas menos.